El corte de garras es una parte esencial del cuidado de uñas de tu perro o gato. Mantenerlas bien recortadas no solo previene daños a tus muebles, sino que también es importante para su salud general.
En este artículo, te explicamos cómo cortar las garras de forma segura, cómo mantenerlas en buen estado y por qué la higiene animal es crucial para la salud de tu mascota.

¿Por qué es importante cortar las garras de tu mascota?
Las garras de tu perro o gato no solo cumplen una función estética, sino que también son esenciales para su bienestar. Si crecen demasiado, pueden causar molestias o incluso problemas de salud. Un corte de garras adecuado previene:
- Daños a la piel: Las garras largas pueden rascar la piel de tu mascota o la tuya, causando lesiones.
- Infecciones: Si se quiebran o se dañan, pueden introducirse bacterias y causar infecciones.
- Problemas de postura: Las garras largas pueden alterar la postura y la forma de caminar de tu mascota.
- Daños a muebles y objetos: Las garras largas pueden dañar muebles, alfombras y otros objetos de tu hogar.
¿Cuándo deberías cortar las garras de tu perro o gato?
El momento adecuado para cortar las garras de tu mascota depende de su actividad y entorno. Si tu perro o gato hace mucho ejercicio en superficies duras, probablemente se desgastarán de forma natural. Sin embargo, si no es así, necesitarás cortarlas de manera regular.
¿Con qué frecuencia cortarlas?
En general, se recomienda cortar las garras de tu perro o gato cada 3-4 semanas. Sin embargo, la frecuencia puede variar dependiendo del ritmo de crecimiento y las actividades de tu mascota. Es importante observar si están demasiado largas o si hacen un sonido al caminar sobre el suelo.
Señales de que necesitan un corte
- Sonido al caminar: Si las garras hacen ruido cuando tu mascota camina, es una señal clara de que necesitan ser recortadas.
- Garras que se doblan: Si notas que se doblan hacia el suelo o se enganchan, es momento de un corte.
- Daño visible: Si ves que las garras están desgastadas o rotas, es importante cortarlas y tratar cualquier herida.
Cómo cortar las garras de tu perro o gato
El corte de garras puede ser una tarea sencilla si lo haces correctamente. Aquí te explicamos cómo hacerlo de forma segura para ti y para tu mascota.
1. Preparación adecuada
Antes de comenzar, asegúrate de tener todo lo que necesitas:
- Cortaúñas especial: Utiliza unas tijeras o cortaúñas diseñados específicamente para animales.
- Toalla o manta: Para envolver a tu mascota si se siente nerviosa o inquieta.
- Premios: Mantén a mano golosinas para premiar a tu mascota después del corte.
2. Acostumbra a tu mascota al corte de garras
Es importante que tu perro o gato se acostumbre al proceso de forma gradual. Puedes empezar tocando sus patas de manera suave, sin intentar cortar nada. Repite este proceso varias veces para que tu mascota se relaje con el procedimiento.

3. Localiza la parte a cortar
Las garras de los perros y gatos tienen una parte llamada «quick», que es la zona sensible y rosada. Evita cortarla, ya que puede causar dolor y sangrado. Solo corta la parte transparente de la garra, que es la que se encuentra por fuera de la zona sensible.
Paso a paso:
- Sostén la pata de tu mascota con suavidad.
- Presiona ligeramente para exponer la garra.
- Corta con cuidado solo la punta, evitando cortar demasiado cerca de la base.
- Si es necesario, corta en pequeñas cantidades y repite varias veces si la garra es muy larga.
4. Control de la ansiedad
Si tu mascota está nerviosa, puedes envolverla en una manta para mantenerla tranquila. Si tienes dificultades para mantenerla en su lugar, puedes pedir ayuda a otra persona para sostenerla mientras realizas el corte. Es importante no apresurarse para evitar accidentes.
5. ¿Qué hacer si cortas demasiado cerca del quick?
Si accidentalmente cortas la zona sensible, no te asustes. Usa un polvo estíptico o un poco de maicena para detener el sangrado. Asegúrate de no cortar las garras demasiado rápido en el futuro para evitar estos accidentes.
Mantenimiento y cuidado
El cuidado de uñas de tu mascota no solo implica cortar las garras, sino también mantenerlas en buen estado para prevenir infecciones o problemas futuros.
1. Higiene animal
La limpieza regular de las patas y las garras es esencial para evitar infecciones. Asegúrate de que tu mascota no tenga suciedad acumulada en las garras. Puedes limpiarlas con un paño húmedo o usar un limpiador específico para patas de animales.
2. Revisiones periódicas
Revisa las garras de tu mascota regularmente para detectar cualquier signo de daño o infección. Si notas que la garra crece de manera anormal o presenta signos de infección, consulta a tu veterinario.
3. Ejercicio y desgaste natural
Para perros y gatos que pasan mucho tiempo afuera, el ejercicio puede ayudar a desgastar las garras de manera natural. Las superficies duras, como el concreto, pueden hacer que se desgasten sin necesidad de cortar.

El corte de garras y el cuidado de uñas son fundamentales para la salud de tu perro o gato. Con una rutina adecuada de mantenimiento y atención, tu mascota podrá disfrutar de una vida más cómoda y saludable.
Si no te sientes cómodo cortando las garras por ti mismo, no dudes en pedir ayuda a un veterinario o a un profesional en cuidado animal. Mantén la higiene animal en su mejor estado para garantizar el bienestar de tu fiel compañero.