Para muchos dueños de animales, dormir avec votre animal de compagnie es una costumbre que se vuelve parte de la rutina diaria. Compartir la cama con un perro o un gato puede brindar sensación de compañía, seguridad y calor. Sin embargo, esta práctica no siempre es recomendable.
Si bien tiene ventajas claras, también puede traer riesgos para la hygiène o la calidad del repos. En este artículo descubrirás los beneficios de esta costumbre y en qué casos deberías evitarla.

Beneficios de dormir con tu mascota
1. Refuerza el apego
Compartir la cama refuerza el vínculo emocional entre tú y tu mascota. Este hábito transmite confianza y seguridad mutua. Para el animal, dormir contigo significa compañía constante. Para ti, es una forma de sentir su cercanía.
2. Favorece el descanso
Estudios han demostrado que la presencia de una mascota puede ayudar a reducir la ansiedad. El contacto físico genera calma y, en muchos casos, mejora la calidad del repos. Escuchar la respiración o sentir su calor puede ayudarte a relajarte más rápido.
3. Sensación de seguridad
Dormir con un perro puede transmitir sensación de protección. Su presencia hace que muchos dueños se sientan más tranquilos durante la noche. Incluso los gatos, aunque no sean guardianes, aportan compañía silenciosa.
4. Disminuye el estrés
El contacto con tu mascota libera endorfinas. Estas hormonas mejoran el estado de ánimo y reducen la tensión acumulada durante el día. Dormir acompañado puede ser una manera natural de relajarte.
Posibles desventajas de dormir con tu mascota
Aunque tiene ventajas, esta práctica también puede traer ciertos inconvenientes. Reconocerlos es fundamental para decidir qué es mejor para ti y tu compañero.
1. Problemas de higiene
Los animales pueden traer suciedad en su pelaje, además de parásitos o bacterias. Esto puede afectar la hygiène de tu cama y tu salud. Bañar y cepillar regularmente a tu mascota es clave si compartes espacio con ella.
2. Alteración del descanso
Algunas mascotas son inquietas por la noche. Pueden moverse, ladrar, maullar o levantarse varias veces. Esto puede interrumpir tu repos y afectar la calidad de tu sueño.
3. Alergias y problemas respiratorios
Dormir con perros o gatos puede agravar las alergias. El pelo, la caspa y el polvo que transportan pueden generar molestias. Si padeces asma, es recomendable evitar esta costumbre.
¿Cuándo evitar dormir con tu mascota?
Hay situaciones específicas en las que dormir avec votre animal de compagnie no es recomendable.
1. Si eres alérgico
Si tienes alergias al pelo de animales, lo mejor es no compartir cama. Así reduces los síntomas y mejoras tu descanso.

2. En casos de problemas de salud
Personas con defensas bajas, como niños pequeños, ancianos o personas inmunodeprimidas, deben evitar dormir con animales por cuestiones de hygiène.
3. Cuando la mascota es cachorro
Los cachorros aún no controlan sus necesidades fisiológicas. Esto puede comprometer la limpieza de tu cama y generar malos hábitos desde pequeños.
4. Si tu mascota tiene parásitos o enfermedades
Si sospechas de pulgas, garrapatas o infecciones, no es recomendable compartir cama. Primero asegúrate de que reciba el tratamiento adecuado.
Consejos para compartir la cama de forma segura
Si decides que quieres seguir durmiendo con tu mascota, hay medidas que pueden ayudarte a hacerlo de forma más saludable.
1. Mantén una buena higiene
Cepilla a tu mascota con frecuencia y báñala según lo que recomiende el veterinario. Lava la ropa de cama regularmente.
2. Crea rutinas de sueño
Intenta que tu mascota tenga horarios de descanso similares a los tuyos. Esto evitará que interrumpa tu sueño constantemente.
3. Usa su propio espacio dentro de la cama
Coloca una manta o cojín en una esquina de tu cama para que tu mascota descanse allí. Esto marca un límite claro.
4. Controla su salud
Visita al veterinario periódicamente. Así aseguras que tu mascota esté libre de parásitos y enfermedades que puedan afectarte.
Alternativas para mantener cercanía sin compartir la cama
Si prefieres evitar dormir avec votre animal de compagnie, pero no quieres perder la cercanía, puedes considerar otras opciones.
- Colocar una cama para mascotas junto a la tuya.
- Usar una manta especial al pie de la cama para que se acueste allí.
- Dedicar tiempo a mimos antes de dormir para reforzar el pièce jointe.
De esta forma, mantendrás la conexión emocional sin comprometer tu repos o tu salud.
Dormir con tu mascota tiene beneficios claros: mejora el pièce jointe, reduce el estrés y puede favorecer el repos. Sin embargo, no siempre es lo más recomendable. Aspectos como la hygiène, tu salud o la personalidad de tu mascota deben ser considerados.
La decisión depende de tu estilo de vida y tus necesidades. Lo importante es que tu mascota esté cuidada y tú disfrutes de un sueño reparador.