¿Cómo se entrenan los perros guía para ayudar a los ciegos?

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Los perros llevan años ocupando un lugar importante en el corazón de los humanos, ya que no solo son mascotas, sino también perros de trabajo que ayudan a las personas necesitadas. Estos brindan una variedad de servicios, que incluyen asistencia para la movilidad, alerta de convulsiones y apoyo para la salud mental. Los perros de servicio más destacados son los perros guía, que ayudan a una persona ciega o con discapacidad visual a caminar por su entorno.

Los perros guía reemplazan los ojos de su guía, por lo que tienen la responsabilidad de tomar una decisión sobre cómo dirigir al guía a un destino específico y protegerlo de posibles riesgos. Las notables habilidades de los perros guía son el resultado de un entrenamiento altamente especializado y no solo debido a factores innatos. En este artículo, aprenderás más sobre los perros guía para ciegos: características esenciales, cómo se les enseña a ayudar al guía y qué no pueden hacer.

Rasgos esenciales de los perros guía

Antes de comenzar a entrenar a un perro guía, los entrenadores siempre evaluarán si el perro es apto para el entrenamiento en función de ciertas características clave:

  • La gran inteligencia es un factor necesario.
  • El afán por aprender es la clave para un entrenamiento intensivo.
  • Tener ganas de agradar y ser amigables con los demás.
  • Permanecer concentrado ante muchos estímulos.
  • No tener miedo ni ser agresivo.

Esos rasgos son características esenciales que todo perro guía debe tener porque servir a una persona ciega en entornos sociales no es un trabajo tan fácil como imaginamos. Los perros no solo tienen que guiarse por su dueño, sino que también deben controlar sus instintos caninos y proteger al guía de los peligros del ajetreado mundo exterior.

Un adiestrador de perros guía tiene la responsabilidad de adiestrar perros para que funcionen como guías para personas con discapacidad. Estos perros ayudan a las personas a ganar independencia y movilidad. Ayudan a las personas a atravesar el tráfico, juzgan la altura y el ancho de los obstáculos y son capaces de evaluar el peligro en diversas situaciones.

formación de un perro guía

Los tipos más comunes de razas para convertirse en perros guía son los pastores alemanes, labradores y golden retriever. Se necesita un tipo especial de perro para convertirse en guía. Deben tener un temperamento tranquilo y paciente y no asustarse por los ruidos o las multitudes.

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La fase de crianza del perro guía

El entrenamiento de un perro guía comienza a la edad de, aproximadamente, dos meses y requiere un entrenamiento reforzado de por vida. Sin embargo, no se recomienda entrenar a un perro adulto con problemas de comportamiento, ya que presenta muchos riesgos tanto para el perro como para el guía.

En el primer año de vida, el cachorro puede vivir con el cuidador o un paseador de cachorros para acostumbrarse a un entorno de vida normal y generar confianza en los seres humanos. Durante este tiempo, los perros deben someterse a un de entrenamiento de cachorros, como obediencia básica, socialización, saber cuando ir al baño, andar bien con la correa y los comandos básicos para realizar diferentes acciones.

El entrenamiento puede ser realizado por la familia, entrenadores especializados o en clases para cachorros. Además, el nuevo aprendiz puede estar expuesto a diferentes situaciones durante el entrenamiento, como estar cerca de multitudes y tráfico, atraído por estímulos y encuentros con personas de diferentes sexos, edades, tamaños y razas. Necesitan que se les instruya para que mantengan la calma y manejen estos problemas con valentía.

Cuando el cachorro tenga un año, debería ser capaz de dominar el entrenamiento básico, seguir todos los comandos básicos (como “sentarse”, “quedarse” y “esperar”) y acostumbrarse a caminar atado con una correa.

La fase de formación de un perro guía

El siguiente paso para los perros guía de segundo año es un período de formación intensivo. Aprenderán todo tipo de habilidades especiales necesarias para trabajar con su guía. Algunos ejemplos son los siguientes:

Guiar a su dueño por una ruta recta

La mayoría de nosotros considera que un perro guía funciona como un sistema de navegación todopoderoso para el guía. En realidad, no pueden leer los semáforos y elegir un atajo sin comandos. Los perros guía funcionan bajo las órdenes de su dueño: ayudan que se mueva con seguridad, evitar obstáculos en el camino, detenerse para evitar que el guía se tope con los bordillos y esperar en los cruces para esperar instrucciones.

Observar las dimensiones de las puertas y los edificios

Los perros guía deben poder medir visualmente la altura y anchura de la puerta en una tienda o edificio para asegurarse de que no golpeen la cabeza ni lastimen el cuerpo de su guía. Se les enseña a evitar entrar en lugares con techos bajos u obstáculos a la altura de la cabeza.

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Avisar a su dueño de los peligros

Los perros tienen un sentido del oído muy sensible e innato, lo que los convierte en una buena alarma cuando aparecen los peligros, como un vehículo muy lejano que se acerca muy rápido. Luego se detienen y advierten al dueño empujándolo o tirando de la cuerda.

perro guía

Reforzar la experiencia del acceso público

Para acostumbrarse a la mayoría de los lugares públicos donde el invidente puede requerir la ayuda de su perro guía, los perros en entrenamiento deben mantener la calma y aprender sobre reglas o procedimientos específicos en los diferentes lugares públicos como tiendas, restaurantes, bancos, escuelas y bibliotecas. Por ejemplo, cuando una persona ciega está cenando con un perro guía, el perro debe sentarse o acostarse debajo de la mesa junto al guía. Algunos pueden ayudar a su dueño a usar un cajero automático y advertir sobre los riesgos circundantes.

Entender la señal para hacer sus necesidades

No es apropiado permitir que un perro haga sus necesidades en un lugar incorrecto en público, ya que esto puede causar dificultades al guía, por ejemplo, que se le pida que abandone el edificio. El entrenamiento para ir al baño es uno de los cursos más importante para un perro guía. Los perros de servicio bien entrenados solo pueden ir al baño en lugares adecuados cuando escuchan las órdenes de su guía.

Comportarse bien cuando camine con correa y arnés

Una vez que los perros guía se caminan con un arnés y con una correa, deben prestar atención y continuar con su trabajo sin olfatear ni distraerse.

Una vez que un perro completa este entrenamiento, se lo empareja con un dueño para un entrenamiento largo. El dueño y el perro de servicio deben ser compatibles, ya que estarán juntos durante los próximos diez años o más. Una vez que el perro alcanza la edad de jubilación, la familia original puede quedárselo. De lo contrario, el perro volverá a la escuela de adiestramiento, donde organizarán la adopción de una nueva familia.

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