Uno de los animales acuáticos más queridos y admirados son los delfines. Se sabe que son muy inteligentes y que tienen un carácter afable hacia las personas, por eso se podría decir que son los cetáceos más observados y apreciados por el hombre desde hace décadas. Para que conozcas mejor a estos simpáticos animales vamos a explicarte algunas curiosidades sobre los delfines sorprendentes.
Las mejores curiosidades sobre los delfines
Los delfines son los animales marinos más fascinantes. Si tienes dudas, lee atentamente las siguientes curiosidades sobre ellos.
1. Todos los delfines tienen nombre
Los delfines son animales que viven en comunidad, así que para poder identificarse entre ellos cada uno tiene un sonido que lo identifica. Es decir, crean unos silbidos para darse a conocer entre ellos y conocer a los miembros del grupo. Lo que sería, dicho en otras palabras, un nombre. Ver debajo del agua no siempre es fácil, por lo que este sistema les permite saber dónde está cada uno de los miembros del grupo.
2. Los delfines apagan su cerebro
Los delfines son mamíferos, por lo que necesitan salir a la superficie para respirar. Cuando quieren dormir salen a la superficie para dejar uno de sus espiráculos fuera del agua. Justo en este momento desconectan uno de los hemisferios del cerebro para poder respirar y mantenerse, a la vez, alerta.
Los delfines, a diferencia de otros animales, no duermen muchas horas seguidas, sino que hacen varias siestas de unos 20 minutos aproximadamente para que descanse una parte del cerebro. Como medio cerebro sigue activo, pueden nadar, respirar y estar atentos a lo que tienen alrededor.
3. Los delfines descienden de animales terrestres
Aunque parezca increíble, los antepasados de los delfines caminaban sobre la tierra. Al parecer el delfín evolucionó del mesoniquio, un animal que tenía al final de sus patas unas pezuñas en forma de dedos. Estos antepasados, por algún tipo de causa, decidieron que el océano era el lugar más apropiado para vivir, lo cual les llevó a evolucionar y cambiar. Y es así como surgieron los delfines que conocemos hoy en día.
Todo esto se ha podido verificar porque los delfines tienen huesos de dedos en sus aletas, así como huesos de patas vestigiales.

4. Existen diferentes especies de delfines
Hay 43 especies diferentes de delfín, aunque es el de nariz de botella, también conocido como mular, el más famoso. La mayoría de especies habita en agua salada, pero una pequeña parte vive en las aguas dulces de Asia o América del Sur.
El lugar en el que viven los delfines es muy importante, ya que es el alimento que consumen lo que marca el tamaño de la especie. El delfín más grande es la orca, que puede llegar a los 9 metros de largo; mientras que el más pequeño es el de cabeza blanca y solo mide 1,3 metros.
5. Los delfines no mastican aunque tienen dientes
Algunas especies de delfines tienen hasta 100 dientes, pero estos no los usan para masticar. La función de los dientes es aguantar los peces y evitar que se escapen antes de comérselos enteros.
Las orcas, que como hemos dicho es la especie de delfín más grande, puede llegar a comer hasta 225 kg de pescado al día. Para conseguir tal cantidad de peces, los delfines trabajan en equipo. Rodean el banco de peces para que estos se agrupen todo lo posible, cuando lo consiguen se turnan para comer. De esta manera los peces no se dispersan y todos tienen la oportunidad de saciar su apetito.
6. La crías nacen por la cola
El embarazo de un delfín, dependiendo de la especie, dura de 9 a 17 meses. Las crías, a diferencia de otros mamíferos, salen por la cola para evitar ahogarse durante el parto. Una vez han nacido, las crías son amamantadas durante uno o dos años y no se separan de su madre hasta que llega el momento de aparearse y tener sus propias crías.
Esto hace que los delfines lleguen a crear grandes familias. De hecho se han encontrado grupos que alcanzan los 1000 ejemplares. Una clara señal de que les gusta vivir en sociedad.
7. Los delfines tienen amigos
Aunque los delfines creen grandes grupos, se ha podido comprobar que la mayoría de ellos suele relacionarse más con unos que con otros y que para ciertas actividades prefieren a unos compañeros antes que otros. Esto indica que, en cierta manera, escogen a unos amigos. Es más, cuando nadan todos juntos suelen hacer pequeños grupos, los cuales suelen ser siempre los mismos.

8. Los delfines sirven al ejército
Los delfines llevan ya muchos años trabajando para el ejército de los Estados Unidos. Los utilizan para explorar puertos, detectar minas submarinas y otras tareas parecidas. Cuando los cetáceos localizan algo sospechoso, alerta a la Marina, tal y como haría un perro policía.
Los diferentes grupos animalistas no ven con buenos ojos este tipo de actividades, por lo que en numerosas ocasiones se ha intentado erradicar.
9. La piel de los delfines se renueva cada 2 horas
La piel de los delfines se renueva cada 2 horas por una única razón, moverse dentro del agua de una forma mucho más rápida. Es decir, esta renovación de la piel hace que sean más aerodinámicos, por eso su piel tiene un tacto aceitoso pero, a la vez, suave.
10. Los delfines se drogan con toxinas del pescado
Afirmar que los delfines se drogan con toxinas del pescado puede sonar un tanto rocambolesco, pero es totalmente cierto. Algunos peces, como el pez globo, tienen unas toxinas muy fuertes. Al parecer los delfines lo saben y lo usan con fin recreativo.
Las toxinas del pez globo son mortales, pero en pequeñas dosis actúa como una especie de narcótico. Hay un vídeo en el que un grupo de delfines se pasan un pez globo y después juegan en la superficie como si estuviesen hipnotizados. Por lo que se veía en el vídeo, no parecía fruto de la casualidad.
Estas son las diez curiosidades sobre los delfines más sorprendentes. Si antes considerabas a los delfines unos animales magníficos, seguramente ahora te lo parecerán aún más. ¿Conoces algo más sobre ellos? ¿Conocías alguna de estas curiosidades sobre los delfines?