Si tienes un acuario, te gustará saber cuáles son los peces más agresivos de agua caliente que puedes comprar en el mercado. Siempre es importante analizar qué animales tenemos y cuáles vamos a adquirir para que exista una buena convivencia y ahorrarnos más de un disgusto. Nosotros queremos ponerte las cosas fáciles. Por esta razón, vamos a contártelo todo a continuación. Podrás sentirte tranquilo controlando el mundo que se desarrolla dentro de la pecera.
Los peces más agresivos de agua caliente
Cuando hablamos de los peces más agresivos de agua caliente, son muchas las personas que se sorprenden al pensar que estos seres son totalmente inofensivos, incapaces de hacer daño a nadie. Ahora, algunos pueden hacer mucho daño, incluso devorar a sus compañeros de acuario. Por ello, hay que tenerlos identificados para evitar una circunstancia de estas características.
A veces se nos olvida que cuando compramos un acuario, estamos adquiriendo un objeto que se convertirá en el hogar de muchos animales y, por ello, se necesita tanto responsabilidad como conocimiento. No podemos adquirir el primer pez que nos llame la atención e introducirlo en el agua, en absoluto. Tenemos que informarnos sobre las características de cada ser, su tipo de alimentación y la temperatura a la que deben vivir, entre otros aspectos. Con el fin de que la experiencia sea más sencilla, en este apartado vamos a describir aquellas especies que pueden resultar más problemáticas debido a su carácter.
Pez Oscar

Los peces Oscar son conocidos por su carácter agresivo al ser muy territoriales. Esto significa que defienden el lugar en el que residen, aunque, en principio, lo hacen sin intimidar a sus compañeros de acuario. Por ello, no necesitan vivir solos, simplemente debemos estar atentos a que la convivencia se desarrolla con normalidad sin bajar la guardia. Si se cuidan de forma adecuada, pueden llegar a vivir hasta quince años. Además, presumen de una gran variedad de colores, como el amarillo, el rojo o el tigre, entre otros.
Para que puedan sentirse cómodos, necesitan un hogar en el que haya 270 litros de agua como mínimo. La razón es que estos peces suelen medir unos 30 centímetros y requieren libertad a la hora de nadar. El acuario debe de tener tapa para que los animales no salten y se salgan, ya que es una características de estos seres, puesto que es su forma instintiva de conseguir comida. Asimismo, les encanta cavar, por lo que lo más recomendable es que en el suelo del lugar en el que residan haya arena o grava. Por otro lado, son muy propensos a comerse las plantas que forman parte de la decoración.
Piraña

Las pirañas son conocidas por las películas que muestran cómo devoran en cuestión de segundos incluso a seres humanos. Ahora, no son tan agresivas como las pintan, aunque sus dientes son muy afilados, pudiendo despedazar al ser que elija como alimento, que suelen ser peces, insectos o pequeños invertebrados. Sus mandíbulas son muy fuertes, pero es extraño que ataquen a las personas. Pueden llegar a vivir, si se las cuida de forma correcta, incluso tres décadas.
Las pirañas tienen que estar en aguas dulces que conserven una temperatura que se encuentre entre los 22 y los 28 grados. Necesitan, además, que el acuario tenga una capacidad mínima de 150 litros por cada una de ellas. Antes de comprarlas, es imprescindible que te informes en la tienda de cómo puedes juntarlas con otras especies, si las tienes, y cómo debes cuidarlas para que tengan una calidad de vida óptima.
Pejelagarto

Se trata de un pez ante el que hay que tener cierta experiencia para cuidarlo. Una de las razones es que, debido a su tamaño, necesita vivir en acuarios que tengan, mínimo, una capacidad de 1000 litros. Se caracteriza por poseer un cuerpo alargado y cilíndrico, con un hocico afilado. Sus escamas son tan rígidas que parece que porta una armadura, lo que reduce su flexibilidad. Asimismo, tiene unos colmillos muy afilados con los que puede triturar los crustáceos o peces de los que se alimenta. Necesita espacio para nadar y le agradan las urnas decoradas con muchas plantas.
Terror verde

El pez terror verde se caracteriza por no ser muy exigente. Aún así, se recomienda que su cuidador tenga cierta experiencia, ya que necesita una alimentación particular y unos parámetros de agua muy concretos. Es bastante grande y agresivo. Por este motivo, requiere un acuario espacioso. Asimismo, hay que tener mucho cuidado con aquellos seres con los que se le quiera juntar. En primer lugar, deben ser cíclidos y tener el mismo tamaño que ellos para evitar que haya enfrentamientos.
Puede llegar a medir hasta veinte centímetros y vivir hasta diez años. Además, presume de tener escamas azules brillantes, por lo que llama mucho la atención de los aficionados a estos seres.
Cíclido texano

Si por algo es tan popular el cíclido texano es por tener una apariencia muy atractiva. Presume de un color gris perlado con puntos blancos. Según crece, resalta, además, el tono dorado. Se trata de un ser agresivo, dato que es importante tener en cuenta a la hora de seleccionar a sus compañeros de pecera. De este forma, estos últimos deben de ser grandes, capaces de defenderse por sí mismos. Así, el acuario tiene que tener gran capacidad para que cada ser cuente con su propio espacio y los conflictos no tengan lugar.
El cíclido texano es incompatible con la decoración debido a que le encanta excavar, arrancando plantas y todo lo que encuentre a su paso. Asimismo, se trata de una especie omnívora que come productos vivos y muertos, pues no son demasiado exquisitos. Pueden alimentarse, por ejemplo, tanto de insectos como de verduras.