Decir «velutina» en Galicia es sinónimo de peligro. En este artículo vamos a hablarte un poco sobre uno de los véspidos más temidos por la población gallega, su nivel de peligrosidad, cómo puedes identificarla y qué debes de hacer si te encuentras con una de ellas en tu camino. Descubre a la avispa velutina a la conquista del norte de España en Galicia.
Avispa velutina a la conquista del norte de España en Galicia
Antes que nada, queremos aclararte que la Velutina no es exclusiva de Galicia ni mucho menos. También puedes encontrarla en otros lugares como Guipúzcoa, Gerona, Aragón, en La Rioja y Mallorca. Y es que esta avispa asiática, llamada Vespa Velutina, como su nombre indica, llegó de oriente y entró en Europa en un barco de carga hasta el sur de Francia. Desde 2010 se tienen registro de su presencia en la Península Ibérica.
La Velutina se alimenta de todo tipo de insectos, incluyendo abejas; de ahí que sea tan temida por los apicultores gallegos, pues han visto mermadas sus producciones de miel cuando las avispas asiáticas atacan las colmenas. Dentro de su alimentación también se encuentran hormigas, mariposas y pulgones.
Si algún día te cruzas con una Velutina en tu camino, estamos seguros de que sabrás identificarla de inmediato. Para empezar porque es un insecto de dimensiones considerables, si se compara con una abeja, por ejemplo. La hembra de esta especie puede llegar a medir, como mínimo, 2 centímetros, pero lo más característico son sus colores. La Vespa Velutina tiene el tórax y abdomen negros, a excepción de una franja amarillo brillante. También tienen las alas oscuras, pero, sin duda, lo más destacable es el aguijón. No tenemos dudas de que, si te encuentras con una, podrás percatarte de que estás ante una Velutina.

Otro dato útil, es que estas avispas asiáticas son diurnas, por lo que es bastante posible que, si estás en tierras del norte de España, en un chiringuito de playa o de excursión por el monte a plena luz del día, te encuentres con una de ellas. ¿Sabes de qué otra forma se encuentra la avispa velutina a la conquista del norte de España en Galicia? Ya hemos adelantado que son el terror de los apicultores, pues las abejas están dentro de sus alimentos favoritos; pero también son una gran amenaza para las cosechas, porque las velutinas se alimentan también de frutas. Así que no es extraño que estas avispas acampen a sus anchas por los huertos y viñedos.
Peligrosas para el ser humano
Si ves una velutina merodeando cerca de donde tú te encuentras, te recomendamos no moverte, algo que suele aconsejarse también ante la presencia de abejas. La diferencia entre unas y otras, sin embargo, es abismal. Las picaduras de abeja duelen y pueden traer reacciones, pero no son tan letales como las de una Vespa Velutina. En alguna ocasión la sección comarcal de algún periódico ha abierto con la noticia de la muerte de algún agricultor por la picadura de una abeja asiática.
Que no cunda el pánico: la picadura solo es mortal para las personas alérgicas. Aún así, en Galicia, cuando una Velutina anda cerca, se suele decir que se prepare el coche para correr a urgencias. Tal vez no sea mortal, pero el dolor de la picadura es considerable, pues suelen inyectar grandes cantidades de veneno. ¿Por qué te recomendamos permanecer quieto en caso de que una de estas avispas esté cerca de ti? Porque las velutinas, como otros insectos, son más propensos a huir que a atacar. Una avispa asiática no te atacará a menos que tú la ataques; esto ocurre si, por ejemplo, atacas su nido, un lugar que las velutinas protegen incluso con su vida.
¿Qué debes hacer si te pica una Velutina? Para empezar, abandonar la histeria. Te contamos que el dolor es bastante fuerte, pero soportable. Después, el dolor da paso a un escozor y una consecuente irritación. Si quieres aliviar un poco el malestar y, además, prevenir la hinchazón lo más posible, debes de aplicar inmediatamente hielo y vinagre. Es posible que el dolor que sientas se prolongue un par de días, por lo que, de creerlo necesario, puedes acudir al médico en busca de antiinflamatorios y analgésicos.