La Doberman es una de las razas de perros más temidas por los hombres. Y es que esta raza se ha forjado la fama de ser una de las más peligrosas y temerarias; pero, en realidad, cuando llegas a conocer bien a un Doberman te das cuenta de que son todo amor.
Orígenes del perro Doberman
El perro Doberman se ha forjado mala fama entre la población general. Estos perros, utilizados la mayoría de las veces como guardianes, en realidad son perros muy cariñosos. Esta raza de perro se llama así gracias al alemán Karl Friedrich Louis Dobermann, quien, a fines del siglo XIX, decidió crear una nueva raza de perros, que fueran eficientes e infundieran respeto, pues él era recaudador de impuestos.
Así fue como el señor Dobermann cruzó varias razas como la Rottweiler, Beauceron, Braco de Weimar y el Manchester terrier hasta que consiguió dar origen a una raza totalmente nueva. La función principal de estos super perros era proteger a su amo frente a los posibles asaltantes. Desde entonces, los perros Doberman han cumplido funciones de guardia y, actualmente, son utilizados ampliamente como perros de defensa, policías, búsqueda y rescate, pero también como guías. Se considera un animal potencialmente peligroso, pero, a pesar de eso, si se les trata con cariño, pueden tener un carácter muy dócil.

Características del Doberman
El Doberman se caracteriza por ser un perro de gran tamaño. Un ejemplar macho de esta raza puede alcanzar una altura de entre 69 y 72 centímetros y pesar hasta 45 kilos. Las hembras, de tamaño más reducido (63 a 68 centímetros), pesan entre 30 y 35 kilos. Como puedes ver, entran en el apartado de lo que se considera perros grandes. El cuerpo de esta raza es cuadrado y musculoso; en la cabeza destacan el hocico plano así como un cráneo particular con una depresión frontonasal ligera.
Las orejas de estos perros son muy distintivas; aunque nacen con las orejas caídas, se les suele operar para levantarlas; actualmente esta es una práctica ilegal en muchos países. Esta raza tiene un cuello largo que le brinda a sus ejemplares mucha elegancia y porte. También destacan los ojos: pequeños y oscuros. El pelo es corto y pegado al cuerpo; el pelaje se caracteriza por ser duro y muy denso. Un perro Doberman puede vivir entre diez y trece años, si se le atiende adecuadamente; las hembras tienen camadas con un promedio de ocho cachorros.
Colores
En cuanto a los colores, es posible que pienses que todos los Doberman son color negro, pero no es así. En cuando a los estándares aprobados internacionalmente, debemos decirte que hay varias clasificaciones según el color. Aquí encontramos el tradicional: negro y fuego. Pero también lo hay color marrón con fuego. ¿A qué se refiere lo de fuego? Pues se tratan de marcas de color rojo-óxido. Estas manchas no están repartidas al azar, sino que pueden presentarse en el hocico, mejillas, cejas, garganta, pecho, metatarsos, muslos, etcétera. Como puedes ver, para que un perro sea considerado Doberman de raza pura, debe cumplir estándares muy altos.
Además de los colores antes descritos, también se aceptan dos variantes más: el isabelino, que es un color entre beige y café pálido con tonalidades en cobre; también se acepta el color azul, que es entre un gris con cobre. Y te decimos más, cuando un perro de esta raza presenta manchas blancas, en automático queda descalificado de los concursos de belleza.
Temperamento de los Doberman
Como ya adelantábamos, a los Doberman se les tiene mucho respeto pues, desde su creación, se les ha considerado perros guardianes. Se asocia a ellos un carácter feroz y muy peligroso. Esto es cierto, a medias. Sucede que estos perros son muy enérgicos y su composición robusta los hace temerarios; esa energía tienen que salir por algún lado, porque, de no hacerlo, el perro se vuelve agresivo.
Por eso es de vital importancia que esta raza reciba educación desde muy pronto. Así, los Doberman pueden convivir con todos los miembros de la familia y socializar con todo el mundo. No, los Doberman no atacan ni muerden a cualquier persona que se acerque a ellos eso sí, el perro tiene que estar adiestrado. No te puedes acercar así porque sí.

Se cree, además, que esta raza de perro es una de las más inteligentes del mundo. No en vano desde siempre ha sido utilizado por los cuerpos policiales en labores de rastreo, rescate, etcétera. A pesar de estas importantísimas labores policiales, los perros de la raza Doberman son particularmente cariñosos y tiernos con sus dueños, eso sí, deben estar muy bien entrenados. Son muy fieles y soportan a los niños, siempre y cuando crezcan junto con ellos.
Los expertos en la materia opinan que a los perros de esta raza no se les debe de adiestrar en labores de protección, pues, por naturaleza ya lo son. Es decir, un perro Doberman no puede ni debe entrenarse para ser agresivo, salvo en casos excepcionales y por personal cualificado. Por ejemplo, cuando el perro se emplee en labores policiales.
Ejercicios
Como mencionábamos antes, los Doberman tienen muchísima energía, pero esto es una cuestión genética. Por eso es fundamental que estos perros salgan a dar largos paseos o vivan en lugares con espacio suficiente para ejercitarse. Llévalo al parque y juega con él, haz que corra, pero eso sí, sin forzarlo. Presta especial atención cuando son cachorros, porque los ejercicios de alto rendimiento en esta raza de perros no debe de empezar sino hasta que alcanzan el año y medio.
Pero, ¿por qué no presionar tanto al Doberman para ejercitarse si debe hacerlo? La respuesta es sencilla. Se trata de una raza con tendencia a padecer distintas cardiopatías. Así que, si quieres que tu perro te acompañe en tus rutinas de runner, nunca lo lleves al límite. Y, por supuesto, no te olvides de llevarlo siempre a sus revisiones veterinarias; sólo el experto puede determinar si tu mascota tiene algún padecimiento del corazón que requiera, además de tratamiento específico, una reducción de ejercicios.
Alimentación y cuidados especiales
Además del ejercicio físico, los perros Doberman no requieren de grandes cuidados alimenticios. Eso sí, si quieres mejorar su calidad de vida (como la de cualquier perro de otra raza), es aconsejable darles un pienso de calidad, especialmente cuando son cachorros. Esta dieta debe mantenerse hasta el año y medio de vida, aproximadamente, pero siempre consulta con el veterinario.
Cuando es adulto, se aconseja darle un pienso especial que permita que el perro absorba mejor los nutrientes de los alimentos. Evita, a toda costa, el pienso tradicional del supermercado -que, aunque económico, puede carecer de todos los ingredientes que tu mascota necesita para desarrollarse adecuadamente-. Tampoco consientas al perro con comida de humanos: recuerda que esta puede tener mucha grasa y los perros Doberman son propensos a las enfermedades cardiacas. En general, nuestra comida (a menos que no sea de una dieta BARF diseñada para tu perro), no aporta grandes beneficios a la especie canina.

¿Y cómo cuidar el pelo de tu mascota? Muy fácil. Estos perros deben bañarse una vez al mes, aproximadamente y con productos especiales para mascotas. La frecuencia del baño depende, por supuesto, de las condiciones en las que viva la mascota. No es lo mismo un perro que vive en un piso, que uno que vive en el campo. No te olvides de darles un buen cepillado; se recomienda una vez cada tres días. El único inconveniente de las razas de pelo corto es que el pelo se incrusta fácilmente en la ropa y los muebles de casa, así que, para reducirlo, siempre es aconsejable cepillar a la mascota una vez por semana para eliminar el pelo muerto.
Además de los cuidados del pelo, no dejes de lado la protección de sus uñas, ojos y orejas. En el primer caso, las uñas deberán cortarse con frecuencia, para evitar que la mascota se haga daño en las patas. Los ojos deben limpiarse con productos especiales o con una gasa estéril para retirar el exceso de legañas; en estos perros, las legañas son color gris, así que si notas un cambio en la coloración de las mismas, acude al veterinario. En el caso de las orejas, no olvides hacerlo con una gasa húmeda o con productos especiales.